Patatas a la Importancia

Lástima que no podáis olerlas... mmmm huele que alimenta ^_^
Esta es una de nuestras recetas típicas de Castilla y León favoritas.

La verdad es que no sé quién le pondría el nombre, pero en mi recetario es sin duda muy Importante. Es un plato de esos sencillos, algo largos de preparar, pero muy agradecido. Un éxito casi garantizado y muy baratico, ideal para los tiempos que corren.

En todas las recetas lo es, pero en ésta es imprescindible el uso de una muy buena patata. Aunque con una normalita, también hacemos el apaño, claro.

Cada cocinero le da su toque. Por ejemplo, mi suegra las hacía sólo enharinadas y con una salsa muy clara. Pero también conozco que las hace con mucha cebolla en la salsa, quien le pone pimentón,... Muy habitual es ponerle unas hebritas de azafrán que le dan un aroma y color muy especial.

Nosotros, cuando queremos darle un punto especial, le añadimos un poco de almendra picada o molida.

Ale, vamos al lío...

Ingredientes (para 4 personas aprox.):
- 1 patata por persona (unos 800 grs)
- harina (la que pida el rebozado)
- 1 ó 2 huevos tamaño L (dependerá de lo que pida el rebozado)
- 4 dientes de ajo
- 1 l de caldo casero de pollo o verduras
- aceite de oliva virgen extra
- 100 ml de vino blanco
- laurel
- sal
- pimienta negra o blanca
- perejil
- 30-40 grs de almendra molida (opcional)
Preparación:

1. Empezamos preparando la salsa de nuestras patatas. En una cazuela ancha (facilitará mover las patatas y que no se aplasten), ponemos 2 ó 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y los dientes de ajo enteros o laminados. Cuando empiece a dorar el ajo (cuidado que no se quemen o amargará todo el plato), añadimos de media a 1 cucharada de harina (cada harina espesa de una manera) y la tostamos ligeramente. Una vez tostada incorporaremos el vino y cuando espese añadiremos el caldo. Removemos y dejamos a fuego lento junto con la hoja de laurel, una pizca de sal y el perejil picado.

2. Vamos a ir pelando y lavando bien las patatas. Las secamos y cortamos en rodajas de aproximadamente 1 centímetro de espesor (cuanto más ancha más le costará cocerse, cuanto más fina, más riesgo de romperse). Las salpimentamos por ambas caras. Tened en cuenta que la patata es bastante sosa.

3. Aquí es donde el orden es imprescindible, y si tenemos un pinche, mejor que mejor. Ponemos en una sartén abundante aceite de oliva virgen extra. Pasamos nuestras rodajas de patata primero por harina (sacudiendo el exceso) y cuando las tengamos todas enharinadas y el aceite esté caliente, las pasamos por huevo batido y las doramos en el aceite.

4. Una vez bien doradas, podéis dejarlas secar en papel absorbente, pero personalmente las echo tal cual a la salsa porque ese poco aceite la mejora. Una vez estén todas en la cazuela con la salsa, las dejamos a fuego medio-bajo durante 30-45 minutos. Aunque os recomiendo que las echéis un ojo cada 15 minutos, porque no todas las patatas cuecen igual.

5. Cuando estén casi hechas, probamos la salsa y rectificamos de sal. Si veis que os quedáis sin caldo, siempre podéis ponerle más caldo o agua caliente. Llegado al final de su cocción, dejamos reposar unos 5-10 minutos antes de servir.

6. Servimos con su salsa y espolvoreamos perejil por encima...

7. Comer y disfrutar ^_^

Trucos y Sugerencias:


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Versión Vegetariana:

- Prescindir del huevo o sustituirlo por mezcla de harina de garbanzo y agua tibia.

Versión Sin Gluten:

- Usar harina especial sin gluten o sustituirla por otro tipo de harina como de garbanzo, maíz,...

Sin Lactosa.

Nos leemos pronto... ¡buenas cocinillas a todos! ^_^

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